martes, 24 de noviembre de 2015

Advertencia:La VENTA contiene ALTAS TRAZAS de VALORES

Mucho se escribe sobre las cualidades que debe tener un vendedor: Honesto, humilde, generoso, positivo, optimista y un largo etc. ¿Acaso no deberían ser las cualidades de cualquier profesional con independencia de sus funciones? 

Me cansa y mucho, seguir oyendo que las personas que hemos hecho de la venta nuestra profesión mentimos mejor que nadie. ¿Acaso los VALORES HUMANOS como la honestidad, la humildad, la responsabilidad o la generosidad corresponden a una profesión y no al ser humano?

Los valores son pautas de conducta que cada uno decidimos y que guían nuestra actividad en nuestro día a día personal y profesional, con nosotros mismos y con los demás. Lo que nos define como personas no está en el color, en el sexo, en la posición social que ocupamos y mucho menos en la profesión que cada uno desarrollamos. Son los valores que cada uno elegimos para nuestra vida los que determinan nuestro comportamiento, pensamientos, actitudes, percepciones, creencias y hasta nuestros hábitos.

Teniendo en cuenta todo lo anteriormente comentado y centrándonos en el ámbito de las ventas, siempre insistiré en que  La VENTA contiene ALTAS TRAZAS de VALORES personales. Ciertamente aplica perfectamente el “dime con qué valores andas y te diré el tipo de vendedor que eres” y casi me atrevo a añadir "y te diré el tipo de clientes que atraes". 

Disponer de un firme sistema de valores te ayudará a establecer relaciones de negocio de largo recorrido, donde el logro de tus objetivos de venta se verá siempre fortalecido. 

Ten siempre presente que 
un vendedor con valores, 
es una persona de gran valor para sus clientes.

En una venta de un producto o servicio lo primero que vende es el vendedor. El comercial es una parte importantísima de la experiencia de cliente y el primer generador de confianza, por tanto, si el cliente no compra al vendedor difícilmente comprará algo. 


Como vendedor debes lograr que el cliente respire tu integridad, lograr que respire que eres una persona con valores y principios. 

¿Por qué? porque la integridad se relaciona con la honestidad, la honradez, el respeto por los demás y la confiabilidad. Una persona íntegra es una persona digna de confianza y cuando el cliente confía no teme que “le cuelen un gol”.

 Foto de @JCAlandt
Pero hoy no quiero seguir hablando del alto  impacto positivo que supone en el  cliente, que seas un vendedor impregnado en valores. Hoy quiero centrarme en ti, que como yo desarrollas tu actividad profesional en el ámbito de las ventas, e invitarte a que juntos reflexionemos qué nos aporta ser personas bañadas en valores para el desarrollo de nuestro trabajo.

En infinidad de ocasiones me preguntan qué cualidad imprescindible debe tener un vendedor.  ¿Sabes qué respondo? Un buen vendedor es ante todo una buena persona. Posiblemente cometerá errores y tendrá tropiezos pero aún así,  cosechará éxitos una y otra vez porque es una persona empapada en valores.

¿Qué aportan y qué suponen tus valores personales para con tu tarea de ventas?

  • Aportan coherencia y el evitan que caigas en contradicciones.
  • Aportan congruencia entre lo que crees, dices y haces.
  • Te facilitan la toma de decisiones sobre los hechos reales y no influenciado por las presiones externas.
  • Aportan motivación para hacer lo que tienes que hacer en cada momento, sin desfallecer y sin perder la sonrisa.
  • Suponen cultivar las relaciones desde la humildad sin perder por ello tu esencia.
  • Suponen convertirte en el ser humano al que compañeros de trabajo y clientes quieren siempre tener a su lado.
  • Suponen que seas una persona que fomentas la confianza y generas negocio sin dejar de  intensificar cada día la seguridad en ti mismo y en tu propio trabajo.
  • Suponen que seas un vendedor con foco que no permite que su energía se disperse, que no permite que  la intencionalidad y el alcance de sus objetivos se debiliten.
  • Suponen que seas una persona con autoconocimiento, control personal y con la autoestima necesaria que te hace ser consciente de tus áreas de mejora y potencialidades.
  • Suponen no creerte nunca tan importante que te haga sentirte superior a tus compañeros o clientes.
  • Suponen cumplir por todos los medios los compromisos adquiridos con tu organización, tus clientes y contigo mismo.

En definitiva, la clave para el éxito comercial de un vendedor es el compromiso interno con sus valores.

Los buenos vendedores son buenas personas